MAS ALLA DE LA VIDA

El otro día fui a ver Más allá de la vida. Una gran película de Clint Eastvood. Narra tres historias que tratan de la supervivencia tras una experiencia con la muerte. Aunque el tema del más allá está presente en toda la película en ningún momento cae en excesos. Es una película comedida en cuanto a su tratamiento del más allá no se pronuncia ni cae en trampas esotéricas, sin renunciar por ello a un punto de esperanza en que exista algo tras la muerte. Hace una crítica bastante acertada de los charlatanes que se aprovechan de gente que busca respuestas.

Me gustó especialmente la forma de tratar temas relacionados con el efecto que causa la muerte en las personas, es más, la  película refleja la supervivencia de tres personas que han tenido experiencias con la muerte, ya sea por haber perdido a un ser querido, por haber estado al borde de la muerte, o por tener una sensibilidad especial. Trata el Tsunami que asoló el sudeste asiático en 2004 o los atentados de Londres. La descripción en imágenes del Tsunami es una muestra de la maestría del director y los efectos especiales muy notables. Esta escena consigue provocar una emoción intensa en el espectador que ha imaginado tantas veces el horror de la gran ola que ya forma parte de su recuerdo. En cuanto a los atentados de Londres los apunta, sin grandes alardes, con sutileza son dos ejemplos de cómo dos acontecimientos en los que ha intervenido la muerte han afectado a miles de personas.

La película es muy lúcida, la dirección fotográfica es muy destacable. El reparto de actores muy acertado, en especial la actuación de Matt Dammond, como George Lonegan vidente que quiere huir de la vida que le depara su don, ganándose la vida de otra manera e intentando vivir al margen de sus visiones. A mi personalmente nunca me habían gustado los personajes que interpretaba este actor hasta que trabajó con Clint Eastvood en Invictus. En esta nueva película nos vuelve a sorprender este actor, haciendo una interpretación de un personaje vulnerable que lo hace cercano al espectador a pesar de su especial don. Muy diferente de los personajes de hombre duro y distante al que nos tenía acostumbrados. Es una interpretación muy real, a pesar de los peligros de tratar a una persona de estas características. Nos aproxima a un personaje nada plano, con sus matices y problemas. El resto de historias y actores están también muy correctos especialmente la actriz Cecile de France en el papel de la periodista televisiva francesa que observa como cambia su vida tras sufrir los efectos del tsunami que afectó a Tailandia en 2004. o la del niño que vive en Londres, protagonista de la tercera historia, que sufre la pérdida de su hermano gemelo mientras espera la rehabilitación de su madre drogadicta.

Además de dirigir esta película Clint Eastvood también es el autor de la banda sonora, la fotografía es de Tom Stern, que trabaja con el director desde el año 2002.

Como de costumbre  esta película de Clint Eastvood es genial.