Película francesa de los directores Eric Toledano y Olivier
Nakache.
Es una película vital positiva, transgresora. De nuevo se
demuestra con esta película la buena forma en que se encuentra el cine francés.
La película está basada en un hecho real, la relación entre
un paciente millonario, que tras un
accidente de parapente queda tetrapléjico y su terapeuta- asistente, un hombre
que procede de un barrio marginal y que acaba de salir de la cárcel. A pesar de
sus diferencias es una relación de igual a igual que es lo que el paciente
necesita. No quiere estar relegado a una silla de ruedas, lo que quiere es
vivir plenamente y el terapeuta le hace tener las experiencias que hubiera
podido tener si no tuviera su problema de salud.
La película es ágil, con un tono de comedia sin perder en
ningún momento el sentido de la realidad y sin caer en ningún momento en la
ñoñería ni en el sentimentalismo. Es una película vital que continuamente
arranca carcajadas al espectador. Muestra como gente normal en situaciones
extremas no pierde el optimismo y se crece ante la adversidad. Es la esencia
del ser humano. Tal vez por ella haya tenido tanto éxito en los tiempos que
corren.
Los dos actores principales están espectaculares François
Cluzet,(al que hemos visto recientemente en “pequeñas mentiras sin importancia”
es capaz de transmitir todos los sentimientos utilizando tan solo la expresión
de su rostro. Mientras que Omar Sy, en su papel de terapeuta está esplendido
mostrando su imagen más carismática. Por
este papel ha conseguido un premio Cesar.