La película es una de las más bonitas que ha realizado el Director Woddy Allen. Hace disfrutar al espectador de la imagen y del sonido desde el primer momento. Es puro cine. Es un homenaje a París, a la música de jazz, a Cole Porter y a los personajes de la cultura que vivieron los años 20 y 30 del siglo XX, y por qué no también a algunos de principios de ese siglo como Toulouse Lautrec.
Woddy Allen utiliza la fantasía como ya lo hizo con Alice o La Rosa Purpura del Cairo, para en esta ocasión, hacer un viaje en el tiempo.
Quien no ha pensado que cualquier época pasada es mejor que el presente.Por ello, el protagonista visita su época favorita y puede codearse con intelectuales que ha admirado, escritores, músicos, toreros, pintores.. Personajes de la cultura que han dejado su huella en la historia. Un homenaje a esos personajes que admira Woody Allen y nosotros mismos, y que gracias a la película toman vida. Ojalá hubieran más como ésta, llena de ternura, humor y cultura..
Es destacable la actuación de Owen Wilson que aquí está fantástico, además de hacer perfectamente creíble su papel, se convierte en el alter ego de Woddy Allen. Es el mejor papel que ha realizado este actor especializado en comedias. También sobresalen especialmente la actuación de Marion Cotillard, en el papel de Adriana, la musa de Picasso y Katy Bates como Gertrude Stein o Corey Stoll como Ernest Hemingway
Una película divertida, romántica, puede que para pasar el rato pero si es así será un tiempo bien aprovechado.
